martes, 25 de agosto de 2009

A Tabaré Etcheverry

Por los rumbos de las coplas
musicales de los cerros
se despeñó canto arriba
rodando contra los vientos.
Del Cerro Guazunambí
y los valles de su Melo
fue recogiendo en cantares
los sentires de su pueblo
para volcarlos en coplas
maduradas en secreto
y ritmos germinadores
en los rastrojos del tiempo
. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .
Ya el sol madura las trojes
de su corazón inquieto...
Y los aires musicales
-troperos del sentimiento-
lo van arreando y al trote
por la rosa de los vientos
Ya han florecido sus cantos
por otros valles y cerros...
Las cañadas y los ríos
los entonan en silencio
hasta cruzar el olvido
y las murallas del tiempo
 . . . . . . . . . . . . . . . . . . .
¡Cid campeador de la copla,
has de cantar hasta muerto!...

1 comentario:

  1. Hola, mi nombre es Juan Carlos y estaría muy agradecido si me dijeras de dónde sacaste ese poema. De qué libro. Estoy haciendo un trabajo sobre Tabaré y, por supuesto, citaré este blog.
    Saludos y espero respuesta. Mi mail es jcalbara@gmail.com

    ResponderEliminar